Jugando con Eddie

-Y entonces como se supone que os.. ya sabes- dije dubitativo

-No morimos-mentí, pero le guiñé levemente un ojo, esperando que notase que en otro momento se lo diría.

-Ahm vale- dije percatandome del guiño

-Lo que también echo de menos es el calor; y el escuchar mi corazón latiendo. Nunca imaginé que esas cosas que me parecían tan normales me iban a provocar tal nostalgia.

-Ya tiene que ser muy duro- dije

-Sobre todo al principio... no sabes la envidia que me dais tú y los demás.

-Si pero tampoco es para tanto si yo fuera como tu, me largaria de aqui por fin- dije

-Yo seré vampiro, pero ni mis padres ni Sweeney lo son; y por ellos me tienen amenazadas. No puedo morder a Sweeney aquí; sería una condena para todo el colegio, y no tengo manera de llegar a mis padres. Pero cuando era humana... las cosas eran distintas, no tenía que temer por las personas a quienes apreciaba, solo me amenazaban a mi.

-Y por que has cambiado respecto a eso?- pregunte

-No sabes lo que tienes hasta que lo pierdes. Mis últimos días como humana estuve muy enferma; casi para morir, pero no me importaba, pues sabía que yo me había buscado eso sola. Pero ahora están amenazando a personas inocentes, que no cargan con todos los crímenes que llevo a cuestas. Mi familia ha sido infectada con el mismo virus que me inyectaron a mi; y a mi marido le puede pasar lo mismo.

-Lo se y por culpa de estos cabrones- dije enfadado

-Estoy planeando convertirlos a todos y, entonces, atacar al Proyecto.

-Convertir a quien?- dije

-A mi familia y a Sweeney. Pero no te creas que me hace ilusión, no quiero condenarlos a esto.

-Es la unica manera?- dije

-No lo sé; no tengo el don de la precognición. Mi don no es muy útil en estos casos.

-Ya veo, y que don tienes?- pregunte

-Mira-señalé a un pájaro que estaba no muy lejos, y lo torturé un momento-No me pidas que lo vuelva a hacer.

La mire asustado.
-eh si mejor no- dije

-No me gusta usarlo; me desagrada. Así encontré a Eddie, fue el primero al que torturé; como compensación, ahora lo cuido.

Mire al conejo cuando dijo eso, no sabia que decir al ver lo que podia hacer con solo mirarte

-No lo uso casi nunca-dije con pena-Odio jugar tan sucio.

-ya veo- dije no muy convencido

-Por favor, créeme-supliqué-No quiero que me veas como a un monstruo.

-Ehm vale tranquila- dije sonriendo