Día de Navidad (habitantes de la casa)

-Verá...-le expliqué toda la historia del virus, y también que la secuestraron. Le conté que después de eso habíamos huido y que vivíamos en casa de mi tía, y le expliqué todo lo que habíamos hecho desde nuestra llegada, incluido lo que había pasado esa mañana y el regalo que había recibido Lupita, como el que teníamos pensado regalarle para Reyes.

-¿Te apetece jugar con la muñeca?

-¿Que? -Pregunto Lisa, con lagrimas en los ojos al oirlo- Y yo que pense que la dejaba en un lugar seguro. Siento todo el trabajo que has tenido que hacer para protegerla. Te lo agardezco de corazon. Esa niña lo es todo para mi, despues de la muerte de mi marido -Dijo.

Asenti sonriendo.
-Si, me gustaria mucho -Dije empece a abrir la caja de la muñeca y a sacarla.

-No me lo agradezca, señora. Para mí, Lupita es como una hija, y haría cualquier cosa por ella. Pero lo que le quería pedir es sí, ahora que todo en el internado se va a solucionar y seguramente lo cerrarán...si dejaría que Lupita se quedara en la ciudad. Si vuelve a México, la echaré mucho de menos. Por eso, me gustaría que dejara que se quedara aquí. Evidentemente, si quiere puede venir a España, yo mismo le pagaría el viaje, pero por favor, no me separe de Lupita.

-Papá Noel tiene muy buen gusto, todo hay que decirlo.

-Mmm -Murmuro Lisa pensativa por un momento- De hecho, estoy deseando ver a Lupita de nuevo. Lo cierto, es que ni a Lupita se lo he dicho, pero estoy viviendo en la ciudad. Veo que Lupita tenia razon, eres un chico encantador. No te preocupes, no te separaras de Lupita facilmente. ¿Tu en el pueblo vives con tu familia? -Pregunto Lisa con una idea que se le habia ocurrido.

Asenti dando palmas.
-Si, y el vestido de la muñeca es muy bonito. Ya se como la llamare -Dije alergre.

-Bueno, ahora mismo estoy viviendo con dos amigos míos y con Lupita, en casa de mi tía. Pero en cuanto cumpla los 18 pienso comprarme mi propia casa, y quizás viva con esos dos amigos. ¿Por qué lo pregunta?

-¿Cómo?

Lisa sonrio.
-Bueno se me habia ocurrido que si querrias venir a vivir Con Lupita y conmigo, cuando acabe todo eso que me has contado. Como un hermano de Lupita, a ella le encantaria la idea. Aunque entiendo que quieras irte con esos dos amigos -Dijo Lisa.


Sonrei alegre mirando a Gisela.
-Lisa, como mi mama -Dije alegremente.

-Por supuesto que me encantaría. Quiero estar cerca de Lupita, como ya le he dicho la quiero como a una hija.

Sonreí.
-Me parece un buen nombre.

-De acuerdo. Entonces pasate cuando todo haya terminado por aqui, y veo a mi hija ya despues os ayudo con las maletas y todo eso. ¿Tienes a mano algo para apuntar la direccion? -Pregunto Lisa.

Sonrei asintiendo.
-Es muy bonito -Dije jugando con mi muñeca Lisa.

-Sí-dije, cogiendo la libreta y un boli.

-Tan bonito como la muñeca.

Lisa le dio la direccion.
-Buenos, pues espero vuestra visita. -Dijo Lisa sonriendo.

-No lo dude. Ahora mismo se lo contaré a Lupita. Seguro que se alegra mucho.

-¿Y qué crees que te van a traer los Reyes Magos?

Lisa sonrei al pensar en su pequeña.
-Saludala y dale un beso muy grande de mi parte -Dijo Lisa.

Sonrio.
-Pues lo unico que yo desearia seria ver a mi mama -Dije alegre. La hechaba mucho demenos.

-Lo haré, se lo aseguro.

-Tranquila, seguro que antes de lo que te esperas vuelves a verla.

-Gracias Victor, gracias por todo lo que has hecho por mi pequeña. Adios, nos vemos pronto -Dijo Lisa sonriendo.

Sonrei.
-Ojala, eso espero.

-Sí, que tengo ganas de conocerla en persona. Adiós.

-Por supuesto que va pasar.